En la ciudad de Gorbea, específicamente en el pasaje Bulnes, se encuentran cerca de 30 vecinos con suministro itinerante de agua potable por cerca de dos semanas, todo esto por rotura de matriz en su sector al realizarse trabajos de pavimentación participativa.
La empresa ejecutora comenzó a realizar los trabajos correspondientes como remoción de tierra, nivelación ya que según en informes de aguas Araucanía no se encontraban matrices de aguas en el lugar de excavación, llevándose la sorpresa que si existían y tienen una data de más de cuarenta años.
Según Abel Vera, secretario comité pavimentación participativa del sector, llevan más de 10 años esperando esta obra de pavimentación en el pasaje Bulnes, donde informa que al momento de comenzar los trabajos, se rompieron matrices de agua que tienen más de 40 años y se encontraban con material fatigado, sin mantenimiento de empresa aguas araucanía.
Esta última, empresa responsable de la distribución de agua en la comuna, impuso una orden en tribunal para que la empresa constructora evite seguir avanzando en el proyecto de pavimentación, dejando las cámaras de alcantarillado abiertas y poniendo en peligro a los adultos mayores y discapacitados que viven en el sector.
Hasta la fecha, Aguas Araucanía no se ha acercado al lugar para resolver esta situación con los vecinos afectados, ya que mantiene una demanda con la empresa ejecutante para hacer responsable del deterioro de estas matrices. Con esto la empresa que estaba trabajando se arriesga al pago completo del proyecto, comprometiendo a los vecinos a cancelar el 50% de la pavimentación participativa, bordeando los 30 millones de pesos.
Por su parte el municipio de Gorbea como inspector del proyecto junto a serviu, han prestado la ayuda necesaria a los vecinos para que esto se resuelva lo más pronto posible, además dejando en forma provisoria agua potable en el pasaje, donde una gran cantidad es una población de adultos mayores y personas en situación de discapacidad.